Eloy González Gavilán, de la mecánica al celuloide

Mecánico de profesión, pero cineasta de corazón. Así podría definirse a Eloy González Gavilán. Nacido en Villalube (Zamora), recuerda el regalo que le hicieron unos familiares de San Sebastián y que acabó condicionando su vida. Era un “Cinexim”, con el que entretenía a sus amigos, a cambio de unas monedas, proyectando los dibujos en movimiento en la pared de un portal en su pueblo natal.
Su padre era el herrero del pueblo y Eloy destacaba por su pericia con las manualidades. “Me acuerdo que hice un tractor en miniatura con la maquinaria de un reloj de cuerda y un trillo con rodillos”.
Llegó a Vitoria con 14 años, gracias a la amistad de su progenitor con el vitoriano Antonio Trincado. “Empecé a trabajar inmediatamente en el Garaje Moderno y esta familia me acogió durante un tiempo, hasta que mis padres vinieron también a vivir aquí un año y medio después”. Recuerda, y no precisamente con agrado, sus ocho meses de servicio militar en Burgos, hasta que tuvo la suerte de pasar a ser mecánico en los cuarteles de infantería en Vitoria.
Rememora también, como si fuera hoy, un día de 1968 cuando probaba en la calle su nueva cámara super 8, que adquirió en Fotos Izarra. Se acercó a conversar con él, en la Virgen Blanca, Celestino Alvarez de Arcaya, que pertenecía a la recientemente creada sección de cine de Diputación, y le animó a pasar por sus instalaciones. Allí conoció además a un grupo de vitorianos que no olvida, entre los que se encontraban Juan Bautista Pardo, José Ignacio Vegas, Francisco Javier Vizcarra y Luis Diaz de Corcuera, entre otros.

De esta forma inició un camino que nunca ha dejado de recorrer y que colocó a la mecánica en un segundo plano. Afirma que aprendió mucho con los festivales nacionales de cine amateur que organizaban, observando el trabajo de profesionales de toda España y, sobre todo, de Cataluña.
Rodó con Ramón Aguirrezabal en 16 mm., “Zergaitik”, con el que obtuvo el primer premio nacional, y en Super 8 “La Guarida. Olga”, con Julia Larrimbe como protagonista, donde se adentró, a principios de los 80, en la problemática de la droga, obteniendo el tercer premio del certamen de 1973. Otros trabajos de su extensa producción son “Sueño fatal”, accésit del Certamen Nacional vitoriano de 1971; “La Cita”, primer premio alavés del Certamen de 1972 y, entre muchos otros, “Últimos Juegos”, segundo premio del Certamen de 1974.
Su afán por aprender le llevó también a la Escuela de Artes y Oficios, donde realizó tres años de fotografía, con Koldo Mesanza, y tres de vídeo con Juan Arrosagaray, con quien realizó el cortometraje de fin de curso, “Perfecto” (2012), que cuenta una historia de dos amigos críticos con la sociedad, que planean divertirse buscando la forma de matar a una mujer. Este trabajo lo realizó con casi una veintena de personas, entre las que se encontraba una de sus protagonistas, Émilie Aranda.
Desde el año 2000 realiza las grabaciones y ediciones de las exposiciones de Vital Fundazioa y colabora con el Festival Internacional de Poesía “Poetas en mayo” y el Hogar Navarro. También ha realizado un documental sobre Miguel Llanes Menéndez, “Vivir aprovechando”, un artista cuyo trabajo se puede identificar con el Art Brut y que expuso su obra en Zaramaga.

Este profesional, que ha captado con su cámara diferentes acontecimientos vitales de la ciudad, trabaja también con la asociación cultural de los Celedones de Oro grabando todos sus actos y dirigiendo los documentales sobre personajes populares de Vitoria. Ha dirigido los trabajos relativos a Ramón Jiménez (Zape), al actor Txema Blasco, con quien también realizó el corto “¿Soy algo para ti? (2017) y a los fotógrafos de Arqué. Precisamente, el 27 de julio en Dendaraba, se exhibe su último trabajo, basado en Xabier Añúa, que recoge, en diferentes emplazamientos de la ciudad, su trayectoria vital. “Yo no paro un minuto y creo que es necesario buscarse una afición cuando llega la jubilación”, explica Eloy, quien hace doce años cerró una etapa de su vida como mecánico en su garaje de Barrancal para continuar cultivando su gran afición.
DOCUMENTAL 3 DE MARZO. Con el impulso de BIZAN de Zaramaga ha realizado este año un vídeo documental, cuando se han cumplido 46 años de los sucesos de Vitoria. “Recuerdos del 3 de marzo” recoge diferentes testimonios sobre los hechos que tuvieron lugar en aquella trágica fecha, con la colaboración de José Emilio Gómez Busto y la de Koldo Larrañaga y RTVE en el País Vasco, con la cesión de fotos.